FelicesFiestas!

Un cuento os cuento, mientras veo el tiempo pasar.
Un cuento, sobre el tiempo que cada año llega puntual
aunque nadie consulte la hora.
Ese tiempo que se escurre entre los dedos siempre
que nuestras manos lo pretenden atrapar.

Este cuento son rumores
de la existencia lejana de un reloj de arena,
que granito a granito construía,
todo aquello que la gente imaginaba
mientras caía el último granito de tiempo,
antes de volver a hacerlo girar.

Este reloj de cuento os envío,
con el deseo de que con él
construyáis todos los castillos de arena
que un año pueda abarcar.